(07/08/2012)
La Sección de Vigilancia de Riesgos Ambientales del Servicio de Sanidad Ambiental, perteneciente a la Dirección General de Ordenación e Inspección de la Consejería de Sanidad, ha establecido para hoy y los próximos 4 días, el nivel de alerta 2 «ALTO RIESGO» «ALTO RIESGO. Alerta tipo II. Se activa este nivel cuando la temperatura máxima prevista para ese día o alguno de los cuatro siguientes es igual o superior a 38,6ºC o se prevé que haya más de tres días consecutivos de este periodo con temperaturas máximas iguales o superiores a 36.6ºC.»
Esta unidad es la responsable de la determinación de los niveles de normalidad o alerta por calor extremo y de la difusión de la información al ciudadano. Esta información es útil para que la población más vulnerable (personas mayores, enfermos crónicos o con problemas cardiovasculares y respiratorios y niños) adopten las medidas de precaución adecuadas para minimizar los riesgos para la salud de las altas temperaturas.
El exceso de calor puede producir efectos perjudiciales para la salud de las personas, especialmente en las más vulnerables, siendo el riesgo más grave de una exposición prolongada al calor el denominado golpe de calor que puede causar la muerte o secuelas importantes si no hay un tratamiento inmediato.
Algunos signos y/o síntomas que nos pueden ayudar a reconocer un «golpe de calor» son, entre otros, los siguientes:
- Temperatura corporal elevada, hasta de 40ºC.
- Piel caliente, enrojecida y seca (sin sudor).
- Dolores de cabeza, náuseas, somnolencia y sed intensa.
- Confusión, convulsiones y pérdida de conciencia.
Consejos
- Comunique con el 112 y/o asistencia socio-sanitaria más cercana
- Mantenga a la persona tumbada.
- Refresque rapidamente el cuerpo, mediante toallas húmedas o abanicos
Recuerde:
- Una persona que sufre un golpe de calor, se encuentra en una situación grave y requiere ayuda inmediatamente. Llame cuanto antes al 112.
- En caso de calores intensos las personas mayores que vivan solas deben extremar las medidas de precaución y estar en contacto con familiares y vecinos o en su defecto solicitar ayuda a los Servicios Sociales de su Ayuntamiento.
- Si está tomando algún medicamento y nota síntomas no habituales o que le hagan preocuparse, consulte a su médico o enfermera.
Protéjase del calor
- Permanezca durante el mayor tiempo posible dentro de su casa en la sala más fresca.
- Baje las persianas y los toldos de las fachadas expuestas al sol.
- Dúchese frecuentemente durante el día o refrésquese con paños húmedos.
- No salga a la calle en las horas más calurosas del día. Si tiene que salir permanezca a ser posible a la sombra, si puede elegir, opte por la mañana temprano o las últimas horas de la tarde.
- Cúbrase la cabeza con un sombrero o gorra y vístase con ropa ligera de colores claros.
- No se esfuerce demasiado cuando esté haciendo mucho calor. Evite hacer deporte, bricolaje, jardinería en las horas centrales del día.
- Es importante que conozca los lugares refrigerados más próximos a su domicilio. Si en su casa no hay un sitio fresco o con aire acondicionado, acérquese en caso de calor extremo, a un lugar refrigerado.
Beba líquidos e ingiera alimentos con frecuencia
- Beba bastante agua y con frecuencia (al menos 2 litros diarios) aunque no sienta sed. Esta recomendación es la más importante. Su cuerpo necesita agua para mantenerse hidratado. Puede utilizar si lo prefiere, bebidas isotónicas para deportistas.
- No consuma alcohol, pues altera la capacidad de respuesta al calor y favorece la deshidratación. Evite las bebidas con cafeína (café, té, colas…) o muy azucaradas porque aumentan la eliminación de líquidos.
- Evite beber líquidos excesivamente fríos.
- Aumente el consumo de frutas de verano y verduras (gazpachos ligeros y ensaladas frías) para recargar el organismo de sales minerales.