Cuando se detecta una infracción de tráfico y no es posible identificar y denunciar en ese momento a la persona que conducía el vehículo, el responsable de dicho vehículo (titular/arrendatario, etc.) está obligado a identificar al conductor que utilizaba el vehículo en el momento de cometerse la infracción, siempre que así se le hubiera requerido.
No llevar a cabo la identificación cuando sea obligatorio, o hacerlo de forma incorrecta, puede suponer que el responsable del vehículo sea considerado autor de una infracción muy grave, lo que puede acarrearle la imposición de una multa de cuantía superior a la originaria. En ese caso, el importe de la multa será del doble de la prevista para la infracción originaria que la motivó, si fuese infracción leve, y el triple, si fuese infracción grave o muy grave.
AQUÍ puedes acudir para realizar la identificación del conductor.